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En el siguiente informativo conocerás sobre la motivación, por qué es importante y qué puedes hacer para mantenerla en tu día a día.

 ¿Qué es la motivación?

La motivación puede definirse como un impulso que involucra fuerzas biológicas, emocionales y sociales que activan un comportamiento. Este impulso puede ser interno o externo e incita a que una persona actúe de una determinada forma para cumplir con una objetivo o meta.

Dentro de la motivación se puede encontrar:

  • Motivación intrínseca: este tipo de motivación proviene de los deseos internos de la persona. Es decir que hay una razón propia por la cual se quiere alcanzar un objetivo.

  • Motivación extrínseca: se refiere al comportamiento impulsado por factores externos como el obtener recompensas o evitar un castigo.

¿Por qué la motivación es importante?

La motivación es la razón del por qué alguien toma una decisión o realiza una actividad. Esta sensación puede favorecer para actuar y conseguir las metas propuestas. Del mismo modo, promueve sensaciones de productividad, autorrealización y autonomía.

¿Cómo mantener la motivación?

La motivación es un proceso que requiere de trabajo constante, acá te compartimos algunas estrategias que puedes implementar en tu día a día para mantenerla.

  • Ponte objetivos realistas: al momento de establecer objetivos es importante tener en cuenta el tiempo y las habilidades que se requieren para cumplirlos. Además, deben ser lo suficientemente retadores y que favorezcan a una sensación de satisfacción.
  • Registra tus avances: en ocasiones puede que los pequeños progresos pasen por desapercibidos y sea necesario tomar una pausa para identificar esos pasos.
  • Date recompensas: las pequeñas recompensas favorecen a que se reconozca el esfuerzo. Estas pueden ser materiales, como comprar algo que se desea o actividades que sean agradables para ti. Por ejemplo: dar un paseo, una comida que te guste o un baño relajante.
  • Recuérdate tus motivos: en ocasiones puede que llegues a frustrarte y sentir que deseas “tirar la toalla”. Justo en esos momentos es cuando debes recordar por qué planteaste esa meta en un inicio. Puedes hacer una lista con estos motivos y así tenerlos presentes.
  • Sé constante, aunque falles: toma este momento para reevaluar tus objetivos. Si al revisar el objetivo te das cuenta de que no es muy realista, puedes ajustarlo con base a tus necesidades y circunstancias.

Información relacionada:

  • La motivación es un pilar fundamental para construir un plan de vida y así poder alcanzar metas y propósitos. En el siguiente enlace podrás conocer más sobre qué es un plan de vida y algunos aspectos fundamentales: https://bit.ly/3AVJ5XQ 

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Fuentes de consulta