En este informativo encontrarás información general sobre la gestión de casos y cómo solicitar apoyo en casos de protección y empoderamiento de mujeres.
La gestión de casos es un proceso colaborativo y multidisciplinario que evalúa, planifica, implementa, coordina, monitorea opciones y servicios para satisfacer las necesidades inmediatas de una mujer sobreviviente de violencia de género y su familia o red de apoyo, a través de la comunicación y los recursos disponibles para promover resultados efectivos y de calidad.
El enfoque de la gestión de casos se basa en:
- Que las mujeres son personas activas que tienen derechos inherentes e inalienables, en lugar de ser víctimas en necesidad de ayuda especial.
- Fortalezas de las personas.
- No requerir un tratamiento especializado como psicología, psiquiatría o medicamentos.
- Una coordinación efectiva.
Particularmente en protección y empoderamiento de la mujer, la gestión de casos identifica, apoya y conecta sobrevivientes de violencia basada en género a servicios para satisfacer sus necesidades y proveer servicios individualizados psicosociales que se centran en la sobreviviente para superar la violencia y mitigar efectos negativos en su vida y bienestar.
Criterios para la gestión de casos protección y empoderamiento de la mujer
Violencia física: agresiones perpetradas a mujeres y niñas que van desde un empujón intencionado, una bofetada o tirar objetos, hasta el extremo del feminicidio. El maltrato físico, además de poner en riesgo la salud y la vida de las personas agredidas, en los casos más extremos, provoca miedo intenso y sentimientos de humillación, que van destruyendo la autoestima de las mujeres y niñas, perpetuando las relaciones desiguales de poder.
Violencia psicológica: actos u omisiones que causan sufrimiento, angustia, estrés, deterioro del autoestima o cualquier otro daño emocional a mujeres y niñas. Puede ejercerse de forma verbal usando insultos ("eres una puta"), desprecios ("no vales para nada"), humillaciones ("¿quién te va a querer con esa cara?”), manipulación (“si no me complaces ya no voy a quererte”). También supone violencia psicológica el ignorar a una persona (no hablar a alguien o hacer como si no existiera) y también la amenaza de agresión física ("si no me haces caso, te voy a golpear").
Violencia económica: busca controlar a la mujer a través de impedirle el acceso a los recursos, como por ejemplo: administrar los recursos económicos sin consultar ni dar cuentas a la mujer, disponer del dinero que ella gana impidiéndole acceder de manera directa a sus propios recursos, descalificar a la mujer cómo administradora del dinero, entre otras. Disponer de los bienes muebles e inmuebles que pertenecen a las mujeres sin su aprobación (Violencia patrimonial).
Violencia sexual: violencia sexual es cualquier acto sexual que es forzado o que alguien está obligado a hacer cuando no quiere. Hay muchas formas de violencia sexual, por ejemplo, acoso por comentarios de connotación sexual hechos hacia mujeres y niñas, asedio, tocamientos, explotación sexual, forzar actividades sexuales que no desee hacer y forzar a tener relaciones sexuales cuando no quiera (violación).
Si consideras que estás viviendo algunas de las situaciones descritas anteriormente o conoces a alguna mujer que está pasando por esto puedes comunicarte al teléfono 7686-4661.
Nota: si deseas recibir apoyo psicosocial u orientación sobre diferentes opciones de servicios en el país identificados en Cuéntanos, puedes escribirnos por WhatsApp https://wa.me/50377874224, Facebook Messenger o Instagram, todos los días de 7:00 a.m. a 7:00 p.m
Fuente de consulta:
- Comité Internacional de Rescate: Documentos de referencia para la gestión de casos.