En el siguiente informativo conocerás cómo detectar una fuga de gas y estrategias para manipulación de válvulas.

En ocasiones es posible que no te des cuenta de que la válvula de gas está abierta hasta que sientes un olor diferente. Este es similar a huevo podrido. El gas debe manejarse con precaución, ya que es altamente inflamable, puede desplazar el oxígeno del aire que respiras y provocar un desmayo.

¿Qué hacer si sospechas de una fuga?

  • Abre puertas y ventanas para ventilar la casa.
  • Evita manipular fósforos, encendedores, ni otro que pueda generar chispas.
  • No enciendas la luz ni aparatos eléctricos.
  • Concéntrate en el sonido ambiente e intenta detectar un silbido que pueda indicar el origen de la fuga de gas.
  • Al detectar la válvula, asegúrate de cerrar el paso de gas.
  • Si ha pasado mucho tiempo desde el inicio de la fuga, puede haber signos físicos como dolor de cabeza, mareos o vómitos, debido al tiempo de exposición.
  • Si consideras que es una fuga grande, evacúa tu vivienda y comunícate con los bomberos para que puedan revisar las instalaciones y reducir riesgos.
  • Si tienes dudas, puedes preparar una mezcla de agua con jabón de platos, pasa una esponja por las conexiones de gas o en la llave del tanque de gas. Si hace burbujas, significa que hay una fuga.

¿Cómo prevenir una fuga de gas?

  • Si vas a salir, cierras las válvulas o llaves de paso.
  • Aleja los productos tóxicos o inflamables de las conexiones de gas.
  • Revisa que las perillas de la cocina estén cerradas.
  • Evita que niños jueguen cerca de la cocina.
  • Asegúrate que la manguera de conexión se encuentre en buen estado, protégela del calor, roedores u otros.
  • Mantener el cilindro de gas al menos a una distancia de 1.5 metros de una fuente que genere chispas.
  • Asegúrate que el cilindro de gas se encuentre en buenas condiciones, sin golpes, abolladuras, corrosión o emisión de olor.
  • Cuando compres un cilindro, verifica que lleve el sello de garantía del proveedor y que la válvula funcione correctamente.
  • Evita colocar los tanques bajo el sol o en lugares donde puedan sobrecalentarse.
  • No dejes hornos o quemadores encendidos sin la vigilancia de una persona adulta.

Es importante que estés atento a cualquier señal de alerta, para actuar lo más pronto posible y reducir riesgos debido a las fugas de gas, que pueden provocar incendios, explosiones o intoxicaciones.

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Fuentes de consulta: