En esta nota informativa te compartimos información sobre en qué momentos un negocio puede declararse en quiebra y qué hacer ante esos casos.

Las pequeñas empresas no siempre tienen éxito al final y es probable que debas considerar la posibilidad de declararte en quiebra, vender tu negocio o cerrarlo de manera permanente.

La declaración de quiebra puede llevar a la liquidación de tus deudas; por lo tanto, no tienes que devolver el dinero; sin embargo, también podría significar que tienes que cerrar tu empresa. Ello probablemente afectará tus finanzas personales y a los empleados y tendrías que pagar impuestos sobre el monto de la deuda liquidada. 

Aspectos a tomar en cuenta en momentos de quiebra:

  • Durante un caso de quiebra, deberías igualmente presentar todos los formularios de impuestos de empresa obligatorios e intentar realizar el pago de tus impuestos. Verifica información en el sitio web del gobierno para saber qué sucede con las deudas liquidadas durante una quiebra, e información fiscal para diferentes tipos de empresas.
  • Otra opción puede ser vender o suspender paulatinamente tus actividades sin declarar la quiebra; lo cual podría ahorrarte tiempo y dinero mientras evitas el sistema judicial y los honorarios de los abogados. Existen compañías y personas físicas que pueden ayudarte a listar tu empresa para venta y búsqueda de compradores.
  • Si nadie se ofrece a comprar tu empresa, podrías intentar vender los bienes de ésta y, simplemente, cerrarla. Antes de finalizar el contrato de alquiler, vender los equipos y desconectar los servicios públicos, habla con tu abogado y contador. Ellos podrán ayudarte a desarrollar un plan y entender tus necesidades durante este proceso. 
  • Puedes saldar la mayor cantidad de deuda posible con el dinero que saques de las ventas y negociar un arreglo que te permita devolverles a tus prestamistas un monto inferior al total adeudado. Si no te declaraste en quiebra y aún adeudas dinero después de este proceso, los prestamistas pueden iniciarte acciones legales a ti o a tu empresa para intentar hacerse del dinero que les adeudas.

Nota: ten en ecuenta que iniciar una empresa cuesta dinero y la provisión de fondos para tu empresa es una de las primeras elecciones financieras que probablemente tengas que hacer en tu carácter de dueño. No te des por vencido y continua intenta salir adelante y poniendo en marcha tus ideas. 

 

Informativo elaborado con el apoyo de VISA y el International Rescue Committe - IRC.